ABB ha logrado una primicia en el sector al publicar la primera Declaración Medioambiental de Producto (EPD por sus siglas en inglés) para grandes motores eléctricos conforme a la norma ISO 14025:2006 Tipo III, que cubre su serie de motores síncronos AMS 1120, estableciendo un nuevo punto de referencia en el sector en cuanto a transparencia en la declaración de emisiones para grandes motores eléctricos. Estos motores se utilizan sobre todo en la compresión de gas y aire en industrias de gas natural licuado (GNL) u otras industrias petroquímicas, así como en la separación de aire para industrias químicas o metalúrgicas.
La EPD, un documento normalizado que detalla el impacto medioambiental de un producto, ofrece una visión completa y verificada por terceros de las emisiones de CO2 a lo largo del ciclo de vida de un motor, desde el diseño, la extracción de materiales, la fabricación, el uso y el final de la vida útil. Por lo tanto, la EPD proporciona a los clientes de ABB datos medioambientales verificados, garantizando la transparencia y permitiéndoles tomar decisiones más informadas a la hora de seleccionar productos que se ajusten a sus objetivos de sostenibilidad.
Los datos de la EPD elaborada para la serie de motores AMS proporcionan transparencia sobre las emisiones de CO2 durante cada etapa del ciclo de vida. El mayor impacto en las emisiones a lo largo de la vida se produce durante la fase de uso, que representa el 99% o 2,4 megatoneladas de CO2, lo que subraya la importancia de una alta eficiencia energética y la selección de la fuente de electricidad durante esta etapa. Por tanto, la mejora de la eficiencia energética y la selección de fuentes de electricidad sostenibles son estrategias clave para reducir el impacto medioambiental global de estos motores. Otra parte crítica del ciclo de vida de los motores AMS es la fase previa en la que se extraen las materias primas y se producen los componentes intermedios, ya que representan 279 toneladas de CO2.
De cara al futuro, se supone que esto garantizará que el sector pueda estar bien posicionado para cumplir los futuros requisitos normativos, incluida la prevista directiva de diseño ecológico de la UE y los próximos requisitos de información no financiera que afectarán a las empresas que cotizan en los mercados de valores de EE.UU., Reino Unido, Suiza o la UE.